Imagina vivir en una ciudad donde sin importar la distancia, tu camino al trabajo sea ágil, sin aglomeraciones, sin necesidad de cargar con monedas, o hacer filas infinitas para conseguir un boleto. Imagina que además el bus que te lleva al trabajo es, sin importar la cantidad de personas con quien compartes tu trayecto, un un lugar cómodo, amplio, limpio, seguro y silencioso. Suma a este sueño que el autobús donde viajas es rápido, y no solo eso: ecológico; así que no tendrás que preocuparte por la cantidad de emisiones contaminantes que proliferan en tu trayecto diario. 

Esto sólo es una parte de algo que se llama MOVILIDAD SUSTENTABLE, y que no es sino el primer paso para hacer del lugar donde vivimos, una CIUDAD INTELIGENTE. Y no, no es sólo un sueño, es una realidad de la que todos los habitantes de la CDMX formamos parte desde hace algunos años. 

Ciclovías por todos lados, apps móviles para prácticamente cualquier necesidad, un sistema de movilidad METRO siempre a la vanguardia, rutas de metrobús cada vez más numerosas, un trolebús elevado en construcción, una tarjeta de movilidad integrada que te sirve para trasladarte en cualquiera de estos medios  de transporte y muchas cosas más. Todo esto ha sido una evolución constante que, si no te has dado cuenta, es el sello de identidad que define a la Ciudad de México. 

Toda ciudad inteligente comienza por su transporte. 

La pregunta sobre ¿Qué hace que una ciudad sea inteligente? Puede ser respondida de muchas maneras, pero la respuesta más simple se reduce a una idea sencilla: Calidad de vida.  

La calidad de vida que una ciudad puede proveer está relacionada con la facilidad de acceso y la sustentabilidad. Emplear recursos de manera racional, sin sacrificar con ello la capacidad de sentirnos cómodos con nuestro entorno. Es ahí donde el transporte se convierte en la base del tránsito de cualquier población a una SMART CITY. 

Llegar a nuestro destino rápido, cómodamente, privilegiando la seguridad y el ahorro de recursos, es la forma más fácil de observar cómo nuestra CDMX ha transitado lenta, pero eficientemente a ser una Ciudad Inteligente. Sólo basta recordar ¿Cómo era transportarnos hace 10 o 15 años en cualquier ruta del valle de México? ¿Cuánto tiempo tomó llegar de un punto a otro? ¿Qué rutas teníamos que tomar para lograrlo? ¿Qué precio tenía cada colectivo?  Teníamos una crisis de movilidad ¿No crees?

El proyecto de movilidad sustentable, que  el gobierno de la Ciudad de México ha emprendido, contempla destinar esfuerzos y recursos  para que el traslado de los millones de personas que circulan diariamente en la capital de México, sea eficaz. Más rutas interconectadas, medios de transporte diversos, unidades modernas y sobre todo SUSTENTABLES. Es en esta nueva etapa que el Metrobús Eléctrico ha llegado a la ruta 3 del metrobús, como una nueva etapa de cara a la movilidad moderna. 
Una ciudad comienza a ser inteligente a partir de su transporte, y el nuevo Metrobús Eléctrico, es el ejemplo más claro de que vamos en buen camino.