Los autobuses eléctricos son prueba de eficiencia energética: conoce cómo ayudarían a México a usar 50% de energías limpias y cumplir los Acuerdos de París.

Los autobuses eléctricos como ícono de la electromovilidad pueden contribuir a que México cumpla su meta de transición energética hacia las energías limpias al 50% en 2050, como establecen los Acuerdos de París contra cambio climático.

Se trata de introducir energías renovables al sector del transporte en general, y del transporte público en específico, ya que aviones, motocicletas, vehículos pesados y autos particulares generan más del 20% de los gases de efecto invernadero (GEI) en nuestro país.

Las ventajas de los vehículos eléctricos para el transporte público son:

• Operación eléctrica libre de emisiones de escape
• Mitigación anual de 90 toneladas de dióxido de carbono, comparado con un autobús regular
• Cuatro veces más eficiencia energética: 97.5 MWh eq/km contra 309.8 de un autobús Euro 6 diésel (metrobús doble piso).
• Reducción de ruido de 80 decibelios a 65.
• Alternativas de recarga como baterías de litio y pantógrafo

En otras palabras, los autobuses eléctricos representan una de las estrategias más eficientes para alcanzar aquello conocido como “descarbonizar el transporte y la movilidad.” Su uso abre un debate que no solo examina los beneficios de la electricidad como fuente energética, sino también las mejores formas de generarla a través de una mezcla de plantas de ciclo combinado y generadores solares y turbinas eólicas.

Por otra parte, es fascinante la variedad tecnológica disponible para operar autobuses eléctricos: en CDMX ya contamos con una flota de unidades de metrobús eléctricos que transforman a la Línea 3 en un Corredor Cero Emisiones gracias a baterías de litio cuya autonomía supera los 300 kilómetros de recorrido con una sola carga.

Otra opción corresponde a las estaciones de recarga aérea, técnicamente conocido como pantógrafo, que conectan con un sistema de rieles instalado sobre el techo del vehículo para ir recargando la fuente de poder en menos de diez minutos. Sistemas así ya operan en Estados Unidos, Alemania, Canadá, Países Bajos y Bélgica.

De modo que los vehículos eléctricos en el transporte público son una alternativa real para lograr un ambiente de movilidad con baja huella de carbono y así reducir al 40% el gasto energético de México hacia 2050: la conversación sobre energías limpias se profundiza para combatir el cambio climático desde nuestros traslados de la vida diaria.